
Perdidos,
confundidos en la vorágine,
Cada uno sumergido en su mundo,
universos de inquietudes,
mas que fantasías,
quimeras que nos enredan,
utopías que edifica el ingenio.
Mundo de papel,
vida de oropel,
perversos afanes
de virginal semblante.
Princesas inventadas
en noches afiebradas,
heroínas convulsas de batallas ficticios,
estrellas apagadas por un vendaval,
Indomables atrevidos
en abierta litis con lo imposible.
Quien se atreve a llamarnos cobardes!